Familias

¿Por qué se aconseja no beber a los menores?

En primer lugar la ley no permite la compra ni el consumo a los menores de 18 años. La principal razón es que los menores tanto física como psicológicamente, no están preparados para enfrentarse a los efectos del alcohol.

La misma cantidad de alcohol afecta en mayor medida al organismo de un menor que de un adulto, ya que su organismo está todavía desarrollándose. El consumo de alcohol puede:

  • Afectar a su crecimiento, a la nutrición y al desarrollo de su personalidad.
  • Reduce la capacidad de aprendizaje y afecta al desarrollo intelectual.
  • Daña físicamente al sistema nervioso y al hígado durante su desarrollo.
  • Puede derivar en problemas de consumo abusivo de alcohol.

Además un joven no tiene la experiencia necesaria para enfrentarse a los efectos del alcohol sobre su capacidad de razonamiento, toma de decisiones, sus sentidos y percepción. Por todas estas razones los menores no deben beber.